Hoy me acosté a las 2 am, horario habitual en vacaciones, y a eso de las 2.13 am ya empecé a conciliar el sueño, hasta que me dormí. Soñé lo que quería soñar. Era una de las pocas veces que deseaba tanto soñar con alguien/algo y pasaba. Fue lindo. Fui feliz. Sonreí, sé que sí. Lamentablemete más tarde me desperté. Lo primero que hice fue mirar mi reloj y eran las 2.48 am. Pensaba que había dormido, minimamente, 3 horas. Pero no. Sólo media hora. Pero parecía un sueño eterno. Al despertar, no sabía diferenciar la realidad del sueño. No sabía si lo que había sucedido minutos atrás era real o no. Parecía que sí. Quería creer que sí.
Creo que esa es una de las sensaciones más feas: el despertar y dudar de la realidad, y darte cuenta que la felicidad de ese wonderful sueño fue solo eso, un sueño y enfrentarse nuevamente a la cruda realidad.
JG ©
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